En este gran
laboratorio que es nuestro planeta tierra todos los seres humanos hemos venido
a trabajar, es decir a evolucionar y si… es cierto, aunque LO CREAMOS O NO… LA EVOLUCIÓN sigue su
proceso ya que es ley universal Crecer,
desarrollarse, evolucionar es ley de vida, el hombre no involuciona. Para
llegar al desarrollo el ser humano debe en primer lugar conocerse a sí mismo, aceptarse
para aceptar al otro. El universo, el sistema, el cosmos, los seres de luz,
están alerta, nos vigilan, nos guían para que Logremos
realizar en nosotros un trabajo para el despertar de la consciencia
Es por eso
que debemos estar atentos a los mandatos, sugerencias, ordenanzas que nos envían.
Sabemos también que nuestra alma o
esencia necesita evolución y que por esa razón ocurren eventos agradables o
desagradables.
Por esa
razón, debemos aprender que todo lo que nos pasa en nuestra vida cotidiana, a
nuestro alrededor, familia, sociedad, negativo o positivo, son experiencias de
vida, para nuestro crecimiento y desarrollo
espiritual, para nuestro despertar de consciencia, para nuestra
resurrección anunciada en todos los libros sagrados.
En este
mundo tan convulsionado, tan discriminador, tan divisionista… donde
reina el quítate tú para ponerme yo.
Este no es el mundo que queremos para nuestros hijos. Queremos un mundo donde
reine el respeto, el amor, la hermandad, la tolerancia. Para llegar a tener un mundo así, donde reine la felicidad,
el ser humano debe en primer lugar encontrarse a sí mismo, limpiarse de todos
los condicionamientos para de esa manera encontrar la verdadera felicidad, el
amor genuino, el amor verdadero.
Este el
mundo que queremos para nuestros hijos.
Chela Palacios
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